Optimización del seguimiento de pacientes crónicos cardiológicos a través del control remoto de dispositivos cardíacos implantables (marcapasos, desfibriladores y resincronizadores). Se trata de un monitor que permite el control de los dispositivos, cuya información se transmite a través de la línea telefónica a un servidor instalado en el hospital. Seguimiento de los pacientes también vía telefónica. Gracias a este sistema se han reducido drásticamente las consultas al hospital por parte de los pacientes que forman parte del programa, reduciendo tiempo y costes tanto para el personal médico como para los propios pacientes. Sistema muy bien acogido por la población usuaria, cuya media de edad ronda los 60 años.
Entrevistamos a Marián Cristina Bas Villalobos (foto), Coordinadora de Gestión del Instituto Cardiovascular del Hospital Clínico San Carlos, y a Julián Pérez-Villacastín, Jefe de la Unidad de Arritmias de dicho hospital:
Este proyecto se basa en la utilización de equipos para interrogación remota de dispositivos cardiacos implantados en los pacientes, para evitar muchas de las visitas a consulta, ¿tienen estos aparatos la misma fiabilidad que la consulta física?
El equipo que se instala en el domicilio del paciente está dotado con la misma tecnología que los equipos instalados en nuestro centro, contando además con la capacidad de transmisión a través de la línea telefónica de toda la información acerca del dispositivo implantado en el paciente. Ambos procesos (recogida y envío de la información), han sido suficientemente probados para garantizar su fiabilidad antes de su implantación en la práctica asistencial rutinaria. No obstante, actualmente hay determinadas mediciones y funciones que no pueden llevarse a cabo desde el domicilio, como la reprogramación de los parámetros del dispositivo implantado, para las cuales, en caso necesario, el paciente debe desplazarse a la consulta hospitalaria.
Al ser la población beneficiaria, por lo general, mayor, ¿cómo han reaccionado ante el uso de nueva tecnología?
La edad media de los pacientes incluidos en el programa de seguimiento remoto es de más de 65 años. Sin embargo, ninguno de los pacientes ha notificado tener dificultades con la utilización de esta nueva tecnología. Muchos de ellos reciben el informe de revisión a través del correo electrónico, además de la vía ordinaria del correo postal. Por otro lado, se les envían mensajes recordatorios y de confirmación al teléfono móvil, y éste es también un aspecto que han valorado positivamente en este nuevo proceso.
¿Cuáles han sido las claves de éxito de este proyecto?
Uno de los factores críticos de éxito para este proyecto ha sido la participación de todos los profesionales de la Unidad en la formalización desde el inicio de este nuevo proceso, involucrando a todas las partes afectadas. Esta protocolización ha permitido tanto su implantación efectiva, como la realización de continuas mejoras. La descripción de las distintas tareas está a disposición de todo el personal de la Unidad, que propone modificaciones a medida que se identifican oportunidades de mejora. Otro factor clave para el proyecto ha sido la colaboración con el personal del servicio de Informática, que ha participado activamente en la incorporación de la información transmitida por los pacientes en la base de datos de la Unidad. Consideramos igualmente que es crucial la contabilización en el Hospital de la actividad de seguimiento remoto, que en nuestro caso se ha materializado en la creación de una agenda virtual de consulta. Finalmente, el mantenimiento de elementos de comunicación con los pacientes (SMS, informe de revisión), que ya no acuden a ver a su médico, se ha detectado como un elemento crucial para afianzar la confianza de los mismos en este sistema.
¿Cuáles los principales problemas?
Uno de los inconvenientes asociado a la introducción de un nuevo proceso es precisamente la inercia existente a continuar trabajando con el sistema anterior, con el agravante en este caso de que el proyecto iba acompañado de una metodología de trabajo completamente distinta tanto para los profesionales sanitarios como para los pacientes. Un problema parcialmente resuelto es el del tratamiento de los datos de los pacientes. Éstos dejan de estar únicamente en el ámbito hospitalario, y se encuentran almacenados en distintos servidores que pertenecen a las compañías fabricantes de los dispositivos. El objetivo final de la Unidad de Arritmias es alcanzar un acuerdo de transmisión automática de la información a través de protocolos internacionales de comunicación electrónica. Por último, la escasez de recursos de enfermería, nos ha impedido involucrar a este personal en un aspecto que creemos es muy importante, pendiente de desarrollo, que es la activación de alertas en los dispositivos implantados para el control continuo de los pacientes.
¿Qué aspectos de mejora se han detectado?
Uno de los aspectos que consideramos que tenemos que mejorar es la extensión del proyecto en el ámbito del servicio de Cardiología, puesto que es posible incorporar el seguimiento de algunos otros parámetros clínicos, por ejemplo relacionados con la Insuficiencia Cardiaca, en el marco del proyecto de monitorización remota de dispositivos cardiacos. Por otro lado, queda pendiente la realización, dentro de la Unidad, de un sondeo acerca de la satisfacción de los distintos profesionales con el proyecto, a semejanza del ya realizado entre pacientes y familiares.
¿Qué recomendaciones harían a otras unidades que quisieran implantar un proyecto similar?
Sin duda el primer consejo sería que no se rindan ante las dificultades iniciales, porque integrar un nuevo proyecto en un centro hospitalario requiere la colaboración del personal de la Unidad, de la Dirección, de Informática, etc. Aprovechar las experiencias de otras unidades que han implantado proyectos de seguimiento remoto de pacientes siempre es una oportunidad aprovechable en el diseño de una nueva actividad. En este sentido, nuestra recomendación sería contactar incluso directamente con otros profesionales para consultar cómo ha solucionado los problemas, qué herramientas han desarrollado, etc.
¿Qué supone para el proyecto la concesión este galardón?
Independientemente del estímulo que supone, es importante como signo de apoyo a la innovación dirigida a gestionar la asistencia sanitaria de las personas con patologías crónicas. Estamos convencidos de que este tipo de tecnología será una herramienta fundamental para garantizar la sostenibilidad de nuestro sistema sanitario.
Hospital Infantil Universitario Niño Jesús, Madrid, por el proyecto “Organización y puesta en marcha de una Unidad de Cuidados Paliativos Pediátricos para toda la Comunidad Autónoma de Madrid”
Catelldefels Agents de Salut (CASAP), Barcelona, por “Mejora de calidad asistencial, gestión clínica y liderazgo”
Dirección de Atención Primaria del Servicio Navarro de Salud, por el proyecto “Reorganización del proceso Asistencial en Atención Primaria”
Unidad de Arritmias. Instituto Cardiovascular del Hospital Clínico San Carlos, Madrid, por el proyecto “Seguimiento remoto de dispositivos cardíacos”
Servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital la Plana, Castellón, por el proyecto “Atención al parto natural y humanización del parto en todas sus vertientes”
Hospital 12 de Octubre y Área 11 de Atención Primaria, Madrid, por el proyecto “Diagnostico temprano del Cáncer Colorrectal: Integración efectiva entre niveles asistenciales”
Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida (APRAMP) por el proyecto “Unidad Móvil de intervención directa con personas que ejercen la prostitución y/o personas víctimas de trata con fines de explotación sexual”
Gerencia de Atención Primaria Torrelavega-Reinosa, Cantabria, por el proyecto “Plan para la prevención y atención a la Violencia de Género”
Sociedad Española de Cardiología y Fundación Española del Corazón, por el proyecto “Información para profesionales e información para el gran público”
Comarca Bilbao de Atención Primaria de Osakidetza, País Vasco, por el proyecto “Mejora del servicio a través de la Gestión del conocimiento compartido”
Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria, por el proyecto “Revista electrónica: Evidencias en Pediatría”
Al Profesor y Doctor Alfonso Castro Beiras, por toda su trayectoria profesional dedicada a la mejora de la calidad asistencial